Mujeres de ojos grandes
Autor: Ángeles Mastretta
Nacionalidad: mexicana (Puebla, 1949)
Obras importantes:
Ø
Arráncame la vida (Premio
Mazatlán 1985)
Ø
Mal de amores (Premio
Rómulo Gallegos, 1996)
Ø
Maridos
Ø
La emoción de las cosas
Ø
El cielo de los leones
Ø
Yo misma
Sobre el género literario: “Relato”
Definición
La palabra “relato” proviene del latín relatus, compuesto por las voces re- (“hacia
atrás”) y latus (“llevado”
o “conducido”), lo cual sugiere que todo relato aborda eventos ocurridos en el pasado.
Esto, desde luego, no es necesariamente así, pero es cierto que los
primeros relatos de la humanidad solían
abordar un pasado mítico, épico y primigenio, ya que
en su mayoría consistían en explicaciones narrativas sobre el origen
del mundo y de la humanidad, a menudo teniendo como protagonistas a
los dioses.
Clasificación
·
Según el soporte en que se
transmiten, pueden ser orales y escritos
·
Según la intención que
tienen, pueden ser literarios, si
tienen intención artística; históricos, si
buscan contar el pasado.
·
Según la temática que
abordan, pueden ser relatos fantásticos,
relatos policiales, relatos amorosos,
relatos eróticos, fábulas, entre
muchos otros.
Características
Los relatos, en general, se caracterizan por lo siguiente:
·
Consisten en recolecciones
de eventos, reales o ficcionales, dispuestos de modo tal que pueden
ser leídos de corrido, de un modo coherente y cohesionado.
·
Constan de una anécdota (el
evento que se cuenta), personajes (a
quienes ocurre la anécdota), escenarios (lugares donde ocurre
la anécdota) y un narrador (la
voz que cuenta la anécdota). Este último es su rasgo distintivo frente a otras
formas literarias.
·
Pueden ser orales o
escritos,
·
Tienen un final
·
Emplean recursos poéticos o
estilísticos para embellecer su anécdota o bien para generar tensión y captar
la atención del lector.
Diferencia entre relato y cuento
La diferencia entre relato y cuento es la que existe entre
una categoría más amplia y una más pequeña: todos los cuentos son
relatos, pero no todos los relatos son cuentos. Sin embargo, en el mundo
literario, es común utilizar “relato” y “cuento” de manera intercambiable, sin
entrar en demasiadas profundidades.
El paratexto
La
portada del libro tiene una pintura de una mujer con los ojos más grandes de lo
normal y vestida a la usanza del primer tercio del siglo XX.
Su
estructura consta de treinta y siete relatos muy cortos, sin títulos, que se
sugiere se lea como lo platea la autora, pues el último relato, el de la tía
Jose Rivadeneira, nos indica el porqué de leerlo de corrido. Sin embargo, los
relatos se pueden leer por separado y según el gusto del lector.
La
obra es dedicada al padre de Ángeles Mastretta (“Para Carlos Mastretta Arista, que
regresó de Italia”) quien contó en una entrevista que él era escritor y además
fue el que la impulsó a que le diera rienda suelta a su imaginación.
El
título de la obra “Mujeres de ojos grandes”, no es una descripción
física que tuvieran estas mujeres, sino, que son mujeres que pueden ver más
allá de lo que la vida les está aportando. Son mujeres con mucho carácter y
temple que se enfrentaron a una sociedad machista, dominada por la hegemonía
homocentrista. Son mujeres rebeldes, valientes, fuertes, revolucionarias,
modernas que logran conquistar la libertad de sus vidas. Estas tías se
anticiparon al pensamiento feminista mexicano de los años ochenta, son mujeres
heroínas que se enfrentaron y rompieron esquemas con una actitud precursora a
las mujeres modernas.
El Contexto
El
mundo mostrado
Tiempo: La
obra se desarrolla en un tiempo cronológico que oscila entre las décadas de 1910 y 1940.
Ejemplos:
“La hacienda de Arroyo Zarco era una larga franja de tiempo fértil en la
cordillera norte de Puebla. En 1910 sus dueños sembraban ahí café y caña de
azúcar, maíz, frijol y legumbres menores.” (Elena, p. 17)
“…cuando
acababa de regresar al campo y al desasosiego feliz de vivirlo, tuvo que irse
otra vez porque llegó la Revolución.” (Elena, p. 18)
“De
todos modos su papá murió como estaba decidido desde que lo concibieron: el
miércoles 15 de febrero de 1935 a las tres de la mañana.” (Isabel Cobián, p.
53)
Psicológico: Este
tiempo está sustentado por las emociones, sentimientos y pensamientos que
embargan a estas mujeres según la problemática a la que se enfrentan, así como,
mal de amores, mujeres que traicionan, que amaron y soñaron revirtiendo el
concepto de lo femenino y romper el silencio.
Ejemplos:
“…ella sentía una pena de navajas por todo el cuerpo y empezaba a maldecir la
traición de su padre.” (Isabel Cobián, p. 54)
“Ella
accedió a entenderlo con sus helados ojos azules y el marido de la tía se
enamoró de aquella frialdad con la misma fuerza intempestiva con que amó
siempre la calidez de su esposa.” (Eugenia, p. 83)
“Desde
entonces vivió en el infierno que es disimular un amor frente a otro, y ya nada
fue bueno para él, en ninguna parte estuvo a gusto, y se le instaló en los ojos
una terrible nostalgia.” (Eugenia, p. 85)
Figuras
retóricas:
Metáforas: “Muchas tardes, cuando era
niña con trenzas y piernas de gato, la tía…” (Leonor, p. 12)
“…su
voz era lumbre…” (Charo, p. 25)
“
Símil: “—Ave María Purísima —dijo el padre
español en su lengua apretujada, más parecida a la de un cantante de gitanería
que la de un cura educado en Madrid.” (Charo, p. 27)
“Era
rico como la selva en las lluvias y arisco como los montes de enero.” (Cristina
Martínez, p. 33)
Hipérbole: “…y la
recordó conversando con sus gatos y podrida en mugre como había vivido los
últimos años”. (Cecilia, p. 111)
Prosopopeya:
Onomatopeya: “…
salir al patio a bañarse con la luna, rumiar acurrucada en su sillón junto al gato”.
(Laura Guzmán, p. 124)
Lenguaje
Popular: “Si hubiera tenido un cinco
de cerebro para intuir ese lío, no hubiera entrado en él.” (Fernanda, p. 41)
“…de
conocerla como la palma de su mano a olvidarla como la palma de su mano.”
(Fernanda, p. 45)
Literario: “Tenía la espalda inquieta y
la nuca de porcelana. Tenía un pelo castaño y subversivo, y una lengua
despiadada y alegre con la que recorría la vida y milagros de quien se
ofreciera.” (Charo, p. 25)
“Cuando
la tía Carmen se enteró de que su marido había caído preso de otros perfumes y
otros abrazos, sin más ni más lo dio por muerto:” (Carmen, p. 49)
Culto: “… al siglo antepasado y en el que se
permitía las más modernas elucubraciones
y fantasías.” (Rosa, p.65)
“Tenía un pelo castaño y subversivo, y una lengua despiadada…” (Charo,
p. 25)
Espacios
Religioso: El
credo que profesan las tías es el católico, pues se narran ritos y frases muy
comunes propias de esta religión. Encontramos, también, tías que son ateas y
van en contra de lo que dicta la religión católica.
Ejemplos:
“Cuando
la enfermedad empezó ella fue a pedirle ayuda a la Virgen del Sagrado Corazón y
poco después al señor Santiago que había en su parroquia…” (Isabel Cobián, p.
53)
“Una
tarde la encontró caminando por la de 5 de Mayo. Ella salía de la iglesia de
Santo Domingo con un niño en cada mano.” (Leonor, p.13)
Ético: Este
espacio está comprometido con las actitudes de las tías que no son bien vistas
por una sociedad arcaica y patriarcal, por lo tanto, cada rebelión, cada deseo
de libertad, igualdad y equidad es confrontado a antivalores que son señalados
por los principios para los cuales fueron creadas, como mujeres educadas para
el matrimonio, la familia, el hogar y para la sumisión del hombre. Esto produce
que las mujeres estén llenas de ambiciones, sueños provocando la
desmitificación de una imagen de lo “ideal”.
Antivalores
como la infidelidad, la mentira, el engaño, la ambición son fomentados como vía
de liberación.
Ejemplos:
La tía Leonor recupera y vive el amor prohibido con su primo Sergio, aunque
esto le cueste cometer adulterio.
Social: Los relatos están conformados por personajes femeninos, estas
protagonistas son todas mujeres subyugadas, empañadas, pisoteadas por hombres
dominantes, machistas, que hacen valer su posición en la sociedad. Sin embargo,
estas protagonistas, de una forma u otra, resultan finalmente triunfadoras y dominantes
ante la opresión masculina, revelando una personalidad vigorosa y mucho más
fuerte de lo que se podría suponer; tienen un espíritu luchador y abandonan los
propios principios y valores para conseguir todo lo que se proponen y cuando se
formulan un objetivo nada las detiene.
Ésta es una alusión directa con el título que sugiere la riqueza interior de
estas almas femeninas.
Son mujeres que pertenecen a una misma clase social, con las mismas
costumbres y rutinas, con los mismos rostros culturales, con una vida cotidiana
hasta la muerte donde la crianza de los hijos, las costuras, las recetas, la
cocina; los servicios religiosos y soportar a sus maridos las lleva hasta el
agotamiento existencial.
Los varones son poblanos domesticados e inclinados hacia el machismo que
al final se convertirá en una lucha de contrarios como lo es el
machismo/feminismo, y así prevalecer “Las mujeres de ojos grandes” como el
género superior.
Estilos discursivos
Directo: “—Debe ser extenuante querer doble —pensaba, cuando veía a Fernanda
quedarse dormida…” (Carmen, p. 31)
“—Me vas a deber vida eterna —le dijo a la Santísima Trinidad.”
(Fernanda, p. 47)
—Ya no te pelees con los hombres, Cristina —dijo su madre—. ¿Quién va a
ver por ti cuando me muera?” (Cristina, p. 32)
Indirecto: “Por eso Manuel me dijo que a mí me quería tanto como a la otra.”
(Carmen, p. 52)
“…, la tía Mercedes le dijo siempre que nada hubiera podido ser distinto,
porque aunque ya nadie quisiera creerlo, el destino es el destino.” (Mercedes,
p. 69)
Narradores
Omnisciente
Ejemplos:
“Tenía la espalda inquieta y la nuca de porcelana. Tenía un pelo castaño y subversivo, y una lengua
despiadada y alegre con la que recorría la vida y milagros de quien se
ofreciera.” (Charo, p. 25)
“Ella y tía Fernanda conversaban en las mañanas. Poco a poco fue
recordando cómo guisar un arroz colorado y cuántos dientes de ajo llevaba la
salsa del spaguetti. Un día pasó horas bordando la sentencia que
aprendió de una loca del manicomio y a la que hasta esa mañana le encontró
sentido.” (Carmen, p. 51)
Testigo
Ejemplos:
“Dicen que
así hizo siempre la tía Valeria y que por eso vivió a gusto muchos años. Lo
cierto es que se murió mientras dormía con la cabeza echada hacia atrás y un
autógrafo de Agustín Lara debajo de la almohada”. (Valeria, p. 39)
“Dicen que no
se vio novia más radiante en mucho tiempo”. (Cristina Martínez, p. 34)
“Cuentan las
malas lenguas que el señor Arqueros no existió nunca”. (Cristina Martínez, p.
35)
Intertextos
“Lo cierto es que murió mientras dormía con la cabeza echada hacia atrás
y un autógrafo de Agustín
Lara debajo de la almohada.” (Valeria, p. 39)
“Te quiero como si fueras Ninón Sevilla o Greta Garbo, María
Victoria o …” (Valeria, p. 39)
Personajes
Las protagonistas, tías que son la excepción, porque vienen a romper con
una sociedad machista, donde el patriarcado es quien ha dispuesto y tratado de
doblegar al género femenino a su antojo. Ellos, los amos y señores a los que
hay que rendirles pleitesía, no son más ni menos los contrarios a los que estas
mujeres, féminas protagonistas, ecuánimes, valientes, llenas de ideales, firmes
de carácter, luchan por dominar el miedo y doblegan al varón, macho poblano de muchas
de sus decisiones.
Bibliografía
Mastretta,
Ángeles (2012). Mujeres de ojos grandes. México: Editorial Planeta Mexicana,
S.A. de C.V.